Publicado el junio 1st, 2016 | por Webmaster
0“Mi hija enseña ballet a sus amiguitas del colegio”
Ariana Cueva Flores, de apenas 8 años de edad, es una de las más entusiastas alumnas del programa de inclusión social Danzando en la Arena, que promueve el aprendizaje del ballet.
Según nos cuenta su madre, doña Doris Flores, su hija llegó a la sala de ensayos de la sede regional de Cultura sin saber nada de esta danza, sólo con el sueño de aprender.
“La oportunidad que le han dado es grande. Estoy apoyando a mi hija porque sé que este es su sueño. Ella replica lo aprendido con sus amiguitas en el colegio durante el recreo, ella dice que es profesora de ballet y que incluso tiene sus alumnitas”, manifestó la feliz madre.
Sobre la barra de la sala de ensayos, las alumnas demuestran las habilidades aprendidas durante los últimos tres meses. El maestro Manuel Calderón, encargado de formar durante diez meses a este grupo de beneficiarias, exhibe el avance logrado en este primer trimestre a la directora de la Dirección Desconcentrada de Cultura La Libertad, María Elena Córdova Burga. El orgullo de los padres es compartido por las autoridades de esta sede regional de Cultura.
La elasticidad, armonía y sincronía de los movimientos reafirman el verbo inicial del coreógrafo Manuel Calderón Gamboa, encargado de este proyecto que tiene como finalidad contribuir al fortalecimiento y promoción del arte y desarrollo socio cultural de las poblaciones vulnerables, así como fomentar la actividad artística de conformidad con los lineamientos y políticas culturales del Ministerio de Cultura.
El taller iniciado en marzo registra algunas deserciones, en la actualidad de los 25 alumnos y alumnas inscritas participan de manera constante 16. Los pequeños y pequeñas danzarines necesitan el apoyo de sus padres para continuar perseverando en el aprendizaje de esta práctica universal.
El programa de inclusión social que ha sido premiado como una Buena Práctica en Gestión Pública por el Ministerio de Cultura, tiene en esta edición como beneficiarios a niños del populoso distrito esperancino.